Esta semana impartí en la UNED una pequeña charla sobre amor líquido, y las trampas que nos juega Tinder para que no consigamos pareja. Y tras la jornada una chica me escribió, contando su experiencia en esta red social, y básicamente proclamando la queja al aire de que "¡es que por qué todos los chicos guapos son idiotas!"
Una explicación común para esta observación decepcionante es que las personas atractivas pueden darse el lujo de ser idiotas porque se les otorga un alto estatus y son muy buscados como socios. Pero hay otra posible explicación.
En general, a la población (de chicos, en general), ya sea dentro o fuera de Tinder, podemos clasificarla en una tabla según dos ejes: uno que mide el grado de simpatía, y otro que mide el grado de atractivo. Y tendréis algo así, en la que apenas hay correlación entre una cosa y la otra (índice de correlación, p, 0,03), tal y como se ve en la siguiente imagen:
Los chicos que son guapos no tienen más o menos probabilidades de ser idiotas, que los que no lo son. Hasta ahora, no tenemos ninguna razón para pensar que los chicos simpáticos no son guapos y que los chicos guapos no son simpáticos.
Pero ahora veamos qué sucede una vez que consideras con quién estarías dispuesto a salir. Desde luego, nadie que no sea guapo y sea un idiota. Entonces, en el espacio de los chicos, las personas con las que podrías salir estarían en la región arriba de la diagonal:
Entre los chicos con los que saldrías, ahora hay una modesta correlación negativa entre el atractivo y la simpatía (p=-0,26). Con esa selección, es más probable que entre los chicos realmente guapos te encuentres más idiotas de los que hay en la media. Y a la vez, es más probable que entre los chicos realmente simpáticos, haya chicos poco agraciados.
Esta es la paradoja de Berkson en funcionamiento. Al seleccionar tanto la simpatía como el atractivo, has creado una correlación negativa entre esas dos cualidades de las personas con las que estarías dispuesto/a a salir.
Un proceso análogo ocurre en la dirección opuesta. No solo eliges con quién estás dispuesto a salir, las personas eligen si están dispuestas a salir contigo. Pedimos disculpas por decir esto sin rodeos, pero a menos que seas Hugh Jackman o Charlize Theron, habrá algunas personas que tendrán mejores opciones. Así que esto descarta otro conjunto de posibles personas con las que podrías salir:
¿Quién queda? El grupo de citas ahora está restringido a una banda diagonal estrecha de la población. Dentro de esta banda, existe una fuerte correlación negativa entre simpatía y atractivo. Dos características que eran independientes, han quedado correlacionadas negativamente por una decisión personal. Tal y como hemos citado, a esto se le llama paradoja de Berkson, y es algo mucho más típico de lo que os podáis imaginar.
¿Por qué todos los actores buenos son feos? ¿Por qué todas las películas que salen de un libro son malas? ¿Por qué los restaurantes que tienen buenas hamburguesas dan malas patatas fritas?
Feliz y fructífera búsqueda del amor.
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